Todos los amantes de los gatos hemos conocido a más de uno que se encuentra constantemente asustado; tanto, que llega a afectar la manera en la que se relaciona con humanos y otras mascotas. Si un gato está usualmente escondido, huye ante cualquier ruido, camina encogido o no permite que te acerques, probablemente tiene algún miedo o fobia que no puede controlar.
Este problema puede llegar a dañar profundamente la relación con sus dueños, por lo que es importante saber cómo resolverlo. Si estás teniendo problemas con las fobias de tu gato, existen algunas estrategias que puedes seguir para ayudarlo a superarlas. Recuerda que esto llevará su tiempo, pero tu paciencia será recompensada cuando veas cómo mejora notablemente la calidad de vida de tu mascota.
Entiende de dónde viene el miedo
Empatía y comprensión siempre serán el mejor punto de partida. No podemos pretender ayudar a nuestro gato sin primero entender la raíz de su comportamiento. Primero que nada debemos analizar cuáles han sido los últimos cambios de rutina en nuestro hogar, ahí puede estar la respuesta.
Mudanzas, nuevas personas, nuevas mascotas, ruidos e incluso constantes visitas al veterinario pueden estar ocasionando nervios y estrés. Intenta controlar estos factores y hacerlos lo más llevaderos en la medida de lo posible.
También hay que entender que muchas veces puede ser parte de la personalidad de tu gato ser miedoso, y no queda más que ser paciente y amoroso. Cuando un gato no convivió con seres humanos en su etapa de socialización, es muy probable que le cueste trabajo hacerlo en su edad adulta. Intenta mejorar la comunicación, haz que confíe en ti y pronto se sentirá cómodo y protegido estando a tu lado.
Dale su espacio
Como dueños sentimos un profundo amor por nuestras mascotas, y al verlas en una situación desfavorable queremos hacer todo para ayudarles, pero para poder hacerlo debemos de comprender cómo acercarnos a nuestra mascota sin contribuir a su malestar.
Cuando veamos que nuestro gato está sufriendo un episodio de ansiedad, lo más recomendable es dejar pasar un rato hasta que se calme. Además, debemos respetar su escondite y evitar acercarnos o hacer ruido.
Aprende a acercarte a tu gato
Los gatos son animales sumamente perceptivos, por lo que el primer paso debe de ser que te relajes, si te nota tenso le provocarás aún más estrés. Háblale con cariño y cuando lo notes más relajado intenta acercarte poco a poco, agachándote hasta llegar a su costado, jamás de frente. Evita mirarlo a los ojos, ya que esto le resultará intimidante.
Otra técnica que podrías intentar es ofrecerle un poco de su comida favorita, el sabor y olor harán que quiera acercarse a ti. Si te permite, intenta acariciar lentamente su cara.
Hora de juegos
Tu mascota debe de asociar el relacionarse contigo como algo positivo, de esta forma se sentirá a salvo cuando está a tu lado. Recuerda que adoptar un gato no solo significa darle un techo y comida, también involucra pasar tiempo de calidad con él y que se sienta amado y protegido.
Es por esto que es altamente recomendable que destines al menos unos minutos al día a convivir con tu gato, sin distracciones de trabajo, televisión o celular. Esto puede ser mediante juegos o caricias, lo importante es que tu mascota te sienta presente en su rutina.
Acondiciona su espacio
Cuando un gato se siente amenazado, uno de sus instintos es huir hacia algún escondite, un lugar donde pueda relajarse y sentir que está fuera de peligro. Es importante que creemos este espacio para nuestra mascota, de esta forma podremos ver que cada vez se calma más rápidamente cuando está asustado.
Esta zona dentro de tu casa debe de estar destinada únicamente para tu gato, y no te preocupes, no debe ser muy grande. Simplemente debes reservar un espacio para su cama, juguetes y arenero. Manténlo limpio y evita que otras mascotas o personas se acerquen, de esta forma tu gato lo podrá identificar como su espacio privado.
Estos consejos son sumamente efectivos y al ponerlos en práctica pueden ayudarte a lidiar con los miedos y fobias de tu gato. Poco a poco notarás que estos comportamientos cesan y que tu relación con tu mascota mejora.
Si por el contrario, el estrés y la ansiedad persisten o aumentan, será necesario consultar con algún especialista para conocer qué es lo que está sucediendo con tu gatito y cómo tratarlo.
Déjanos saber si este artículo te ha ayudado y compártenos otras formas que conozcas para calmar a tu gatito.