¿Sabrías dar primeros auxilios a tu gato?

El hecho de que pasemos la mayor parte del tiempo dentro de casa no quiere decir que no seamos susceptibles de padecer algún accidente y, como gatos que somos, necesitaremos de vuestra ayuda para sanar lo antes posible si nos hacemos daño. Así que, ¿sabrías dar los primeros auxilios a tu gato?

No os asustéis que tampoco os vamos a pedir que os convirtáis en cirujanos ni nada parecido. Lo que sí necesitaremos es que mantengáis la calma y seáis siempre conscientes de que somos animales y no podremos expresarnos como vosotros necesitáis, así que, armaros de paciencia y prestar especial atención a nuestros cuerpecitos.

Lo más habitual es que nuestros accidentes se traduzcan en traumatismos, heridas al pelearnos con otros gatos o demás mascotas del hogar y atragantarnos al tratar de comernos algún que otro objeto extraño. Pero es posible que nuestros pequeños necesitan que conozcas los primeros auxilios para realizar a un gato.

La mayoría de los golpes que nos llevamos son consecuencia de caídas desde demasiada altura. Lo que soléis llamar como síndrome del gato paracaidista y es que, nos encanta cotillear todos los rincones del hogar por muy alto o escondidos que estén y los saltos, muchas veces, no son inevitables.

Cada vez que caemos al suelo solemos plantar primero las patas traseras y después las delanteras pero, si caemos con bastante ímpetu nada nos librará de darnos un buen golpe en la mandíbula. Es decir, que si caemos mal y nos rompemos algún hueso, seguramente sea alguno de estas partes de nuestro cuerpecillo. En estos casos, recordad que el dolor no nos permitirá dejar que nos toquéis con la confianza a la que os tenemos acostumbrados así que, hacedlo solo cuando estemos tranquilos e inmovilizarnos la pata o mandíbula en la dirección que la encontréis. Nunca intentéis recolocarnos los huesos vosotros mismos y, una vez que estamos inmovilizados llevadnos al veterinario más cercano.

En cuestión de heridas, limpiadnos la zona de sangre y pelitos y que sea el especialista el encargado de curarla más profundamente e indicaros la mejor manera para seguir curándonosla.

Por último, somos muy propensos a meternos en la boca todo lo que encontramos así que si veis que perdemos el apetito o intentamos vomitar a cada rato sin escupir nada, es que nos hemos tragado algo que no deberíamos. Por mucho que creáis ver el objeto en cuestión dentro nuestra garganta, jamás intentéis sacarlo por vuestra cuenta. Llevadnos con urgencia al veterinario para que nos despeje las vías respiratorias y volvamos a comportarnos como siempre… e intentad no dejad a nuestra alcance nada que pueda perjudicarnos.

shutterstock_1603403

Love this post? Spread the word
Facebook
Pinterest
Twitter
LinkedIn

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *