Uno de los accesorios más importantes para un gato casero es el rascador. Los felinos que no tenemos a mano ninguna superficie en la que afilarnos las uñas tendemos a buscar otras alternativas, pudiendo llegar a hacer destrozos en muebles y tejidos, por eso son tan importantes los rascadores para gatos.
Desde los primeros meses de vida de un gatito es necesario enseñarle a usar el rascador, ya que más que un juguete, es una forma de mantener nuestras uñas más cuidadas, y liberar estrés al mismo tiempo que nos mantenemos en forma.
Usos de los rascadores para gatos
Entretenimiento
Algunos tipos de rascadores son de lo más entretenidos. Incluyen zonas de juego en las que el gato podrá arañar, trepar, curiosear, e incluso jugar con cuerdas, bolitas y otros muchos detalles.
Ejercicio físico
Al afilar las uñas, los gatos hacemos estiramientos beneficiosos para nuestras articulaciones. En el rascador podemos liberar tensión y energía, muy necesario para los gatitos pequeños que son más activos, pero también para los gatos adultos que comienzan a tener problemas de movimiento.
Cuidado de las uñas
El beneficio más conocido del rascador para gatos es el cuidado de las uñas. Nuestras uñas crecen más rápidamente que la de los humanos, y tenemos que limarlas para que no nos molesten al caminar. Gracias a la superficie rugosa del rascador, es más fácil mantenerlas sanas y cuidadas.
Protección
¿Te has fijado que tu gato suele frotar su cabeza contra el rascador? Es una forma de marcarlo como suyo, considerándolo un objeto personal en el que siempre encontrará refugio y protección cuando esté más estresado.
Cómo elegir el rascador para mi gato
Cada gato tiene sus propias preferencias a la hora de usar el rascador. Escoge el tipo de rascador que mejor se adapte a tu hogar y también a tu gato.
Si tienes suficiente espacio en tu casa, aprovecha para colocar un rascador de gran tamaño con mucha superficie que pueda usar tu mascota.
Si en cambio tienes una casa más pequeña, bastará con que dejes a disposición de tu gato un par de rascadores en sitios estratégicos, donde tu mascota pase más tiempo, y que por supuesto, sea del tamaño adecuado. Como mínimo, tu gato deberá poder estirar por completo su cuerpo para adoptar una postura cómoda mientras se lima las uñas.
